Escuchaba con atención las palabras del Dr. Agustín Carstens, gobernador
del Banco de México, en el reporte trimestral que presenta. Se refirió a momento que atraviesa la economía del mundo, con una moneda china devaluada tres
por ciento, lo que le ha pegado a todos por igual. La guerra de monedas que golpea al euro, al yen japonés, a la libra esterlina, al real de Brasil, y por
supuesto a nuestro peso, ante un dólar fortalecido, lo que ha causado fuerte
turbulencia y no se ve para cuando regrese la calma.
El yuan tira a los mercados, las divisas y el petróleo y esto pega a todos por igual.
El Dr. Carstens se refirió claramente a un tipo de cambio real, primero
en su exposición y después ante las preguntas de los compañeros de los medios
de comunicación. Dijo que un aumento de la tasa de interés de los Estados
Unidos, implicará necesariamente una depreciación del tipo de cambio que haga a nuestra moneda más
competitiva. Agregó que el Banco de México verá que ocurra de manera gradual y competitiva
para amortigüar los ajustes a las tasas de interés.
Agustín Carstens dijo que aún no se nota un efecto negativo en
la inflación por el aumento del precio del dólar, y dijo que está bien anclada. Carstens agregó en su exposición que aunque el IGAE no
muestra un crecimiento acelerado, el consumo en el mercado interno se ha
fortalecido. El empleo reportado ante el IMSS ha mejorado en parte por el paso
de muchos a la formalidad.
Sobre la industria, dijo Carstens que las exportaciones
petroleras se han desplomado, las de productos no petroleros no han mejorado a
pesar de las ventajas de un dólar más caro. Dijo que la industria que sí va a la alza es
la automotriz, pero las demás se han debilitado.
El Banco de México redujo por cuarto trimestre consecutivo, su
pronóstico de crecimiento para este año y lo deja entre 1.7 y 2.5 por ciento,
de entre un 2 y un 3 por ciento.
Con esto el crecimiento de este año se acerca al 2.1 por ciento registrado
el año pasado y el pronóstico para el 2016 no es mejor.
En Resumidas Cuentas, lo que dijo el Doctor Carstens confirma
que el dólar cercano a los 17 pesos o más, está aquí para quedarse. No sé
exactamente cuánto será un tipo de cambio real, pero lejos estamos de volver a
ver un tipo de cambio debajo de los 16 pesos.
La baja del pronóstico de crecimiento es un duro golpe al bolsillo y las
expectativas no son nada halagüeñas. Habrá que estar preparados.
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