elpaís.com |
La bomba que hizo estallar un joven de padres libios nacido en
el Reino Unido en uno de los accesos al Manchester Arena la noche del pasado lunes, ha conmocionado al
mundo por su naturaleza brutal. Salam Abedi de 22 años de edad escogió como
blanco a niños y jóvenes seguidores de la cantante pop estadounidense Ariana
Grande. Para hacerlo empacó una bomba casera en una mochila azul y se ubicó en
uno de los vestíbulos que conectan con la estación del Metro Victoria de
Londres. No fue necesario esconder sus explosivos para pasar una revisión. El
terrorista hizo estallar su carga explosiva justo cuando los miles de
espectadores abandonaban el lugar de conciertos. El saldo es de 22 muertos, con
edades que van de los 8 años a los 50. Se ha revisado al alza el número de
heridos a 75.
lavanguardia.com |
El atentado ha puesto a prueba los sistemas de seguridad en
los eventos multitudinarios y los que no lo son tanto. Por lo pronto la alerta
en el Reino Unido está a un grado de su nivel máximo, militares armados de
fusiles automáticos han sustituido los recorridos de los bobies, como se conoce
a los policías de la capital inglesa. Londres es una de las ciudades del mundo
junto con París y Nueva York que atrae al mayor número de turistas. Eventos en
la capital inglesa como el cambio de guardia en el Palacio de Buckingham,
ceremonia que demuestra la pompa y circunstancia de los británicos en donde
guardias a caballo escenifican para los turistas el relevo de los soldados
vestidos en sus vistosos uniformes de casaca roja, pantalón negro, gorra alta que en sus orígenes fue de piel de
oso, hoy de material sintético por eso del respeto a los animales fue
cancelando ante el temor de otro atentado. Cualquier sitio frecuentado en el
mundo es hoy blanco del terrorismo.
elperiodico.com |
Ariana Grande, la joven estadounidense que actuó la noche del
lunes por lo pronto canceló los conciertos programados hasta el 5 de junio en
Londres, Amberes, Lodz, Frankfurt y Zúrich. Otros conciertos de otros artistas fueron
pospuestos entre respeto a las víctimas y temor a un nuevo atentado. Bono el
líder del grupo U2 dijo que lo peor de la humanidad fue exhibido en Manchester.
Lo sucedido en la arena de espectáculos pone en riesgo a la
industria de la música. Los artistas musicales ya no venden discos, esto ha
cambiado por descargas y basan parte importante de sus ganancias y de su éxito
en el número de conciertos que ofrecen. Por eso hoy la industria musical y las
actividades laterales que traen de la mano está preocupada, el riesgo real de un
atentado a manos de un lobo solitario ya no dentro del estadio o foro sino en
uno de los accesos, hace peligrar a esta
importante actividad que hoy revisa la manera en que reaccionará ante la
tragedia y el reforzamiento de la seguridad, sin duda estamos ante una tranformación para mal.
0 comentarios :
Publicar un comentario