La pesadilla americana

Por Arturo Corona M.

Por un “pelito”, la juez federal Susan Bolton de los Estados Unidos, logró suspender temporalmente la implementación de tres artículos de la controvertida Ley SB 1070 que debía entrar en vigor este jueves en el estado de Arizona. En la corte se argumentó con éxito que ningún estado de la Unión Americana puede decidir sobre política migratoria, asunto que compete sólo a la autoridad federal, lo que le quitó los dientes a la policía para detener a cualquiera sólo por el color de su piel. Esto no quiere decir que la ley haya sido cancelada, es tan sólo el inicio de un largo camino en el que el debate pasará por varias instancias dentro del sistema jurídico de los Estados Unidos. La gobernadora Jan Brewer a quién muchos dibujan como la mala de la película, calificó la decisión judicial como un mero “escollo” en el camino y apelará la decisión.



¿Qué es la SB 1070?

Es importante subrayar que la ley no se canceló, únicamente los artículos que le daban libertad a la policía para detener sospechosos de ser indocumentados se canceló momentáneamente, lo que entró en vigor este jueves acota a los indocumentados. Es un delito transportar, y refugiar a personas sin papeles, está penado darles trabajo, alentarlos a quedarse a vivir en los Estados Unidos. La juez Bolton bloqueo parcialmente algunas de las partes más controvertidas de esta “Ley estatal 1070” el gran logro fue evitar que la policía tuviera la autoridad para detener a cualquier persona que circulara libremente, tan sólo por su aspecto latino e indocumentado, lo que evita una cacería de indocumentados tan sólo por el color de la piel lo que se ha calificado de racista.

Una buena ley

A pesar de lo que se diga, la ley antiinmigrante ha logrado lo que no se había hecho desde antes de los ocho años de la administración Bush y los de Barack Obama: subir el tema migratorio a debate en los Estados Unidos ante la urgencia de una ley nacional que ordene la migración ilegal. Pero el Congreso está comprometido con otras reformas, y se prepara para las elecciones legislativas en noviembre próximo. Se ve muy remoto que los congresistas se arremanguen las mangas de la camisa y se pongan a trabajar en una gran reforma migratoria, será hasta el próximo periodo en el Congreso. Por lo pronto algunos hablan de un triunfo para el presidente Barack Obama, otros aseguran que fue un revés para su intento de reelegirse. Según los sondeos, el 70 por ciento de la población de Arizona respalda esta ley y otros estados como Texas y Florida podrían seguir la ruta de Arizona y establecer leyes similares.

En resumidas cuentas, por ningún motivo se debe ver lo sucedido esta semana en Arizona como un triunfo para los trabajadores mexicanos o para la política migratoria, al contrario cada día se cierra más la llave de la migración de mexicanos indocumentados a los Estados Unidos, la redadas en los lugares de trabajo son cada día más frecuentes, los mexicanos son explotados por sus patrones y viven bajo la amenaza de ser deportado. La crisis aunada a las políticas que penalizan la contratación de mano de obra indocumentada, castigan a lo que ayudan a los sin papeles, está cada día más presente en los principales estados que acogen el trabajo de los mexicanos ilegales. Tan sólo el mes de junio las remesas cayeron casi dos por ciento. No pretendo encontrar el “hilo negro”, pero la crisis en nuestro país, la inseguridad, la falta de empleos, han sido el detonador de que nuestros paisano prefieran irse a los Estados Unidos, aún a expensas de los peligros que corren para enviar dinero a sus familias. El “sueño americano” no va por ese sentido, más bien se ha convertido en la “pesadilla americana”, nos toca solucionarlo en nuestro país y presionando por una política migratoria que termine con la explotación de los “sin papeles”.