Los patrones de consumo de los jóvenes mexicanos mayores de 18 años de edad, son un área de oportunidad para la nueva cadena de televisión abierta y para que las dos restantes se den cuenta de lo que buscan los jóvenes y de cómo lo obtienen. Ya los tiempos en que una persona esperaba en alguna avenida a que salieran los periódicos vespertinos o aguardaba el noticiario 24 horas de Jacobo Zabludovsky  para informarse es cosa del pasado. Hoy no sólo el acceso instantáneo a información es algo cotidiano, sino que todos podemos interactuar y reportar algo que ocurra en la calle.

El Instituto Federal de Telecomunicaciones, el IFT, acaba de dar a conocer su Cuarto Estudio de Preferencias del Consumidor, un amplio reporte que muestra la manera en que cambian las formas de obtener información y las maneras de hacerlo.  Hoy el acceso a Internet y a redes sociales ha venido a cambiar los hábitos de consumo entre los jóvenes. Según la encuesta, el teléfono inteligente es el preferido en un 67 por ciento para navegar por las redes, contra el 50 por ciento que prefiere una computadora de escritorio. La televisión de paga es preferida sobre la televisión abierta, pero hay que decir  que esta preferencia se debe en gran medida a buscar mejorar la calidad de los canales de tv abierta, aún el consumo de servicios como Netflix y Clarovideo son para una franja pequeña de audiencia. 



De cada diez usuarios de televisión de paga, ocho tiene contratado un paquete básico, ha pasado un año y no han contratado un servicio de pago por evento, el 94 por ciento no tiene contratado un servicio caro como canales Premium, ni canales de alta definición, lo que sube más la renta mensual.E el 99 por ciento tiene contratado un plan que incluye hasta 100 canales.  La mayoría de los usuarios que contrata su servicio en la modalidad de single play, es decir servicios no empaquetados, paga menos de 350 pesos mensuales, mientras que los que tiene doble play que es Internet más telefonía pagan entre 351 y 450 pesos mensuales. Los servicios de televisión llamados Over the Top o OTT, como Netflix o ClaroVideo, aún no tienen un amplio mercado en México. El 85 por ciento de los encuestados dijo no tenerlo, contra sólo el 12 por ciento que dijo que si.   Los clientes con alguna discapacidad, aseguran que el servicio de la televisión de paga no atiende sus necesidades específicas.  




Este primer semestre del año se darán las bases para la licitación de la cuarta cadena de televisión abierta que quedó pendiente en el 2015, asegura Luis Fernando Borjón, comisionado del Instituto Federal de Telecomunicaciones.  Sobre la fecha en que el nuevo canal de televisión abierta, propiedad de Cadena Imagen, deberá salir al aire, dice que tiene tres año para hacerlo, aunque –lo digo yo- se espera que este año se lance al aire la tercera cadena de tv abierta, algo que no habíamos visto en poco más de veinte años.
Televisa llega tarde al mercado de la televisión restringida, pero llega. Lanza blim.com y busca una tajada del mercado que tiene Netflix en un 68 por ciento.



La competencia es esperada por los consumidores que han cambiado su manera de ver televisión, cada día menos ven los canales de televisión abierta lo que obliga a preguntar ¿vale la pena invertir y esperar más de cinco años para ver un regreso de la inversión? los empresarios dicen que si, basados en la televisión digital terrestre que les da canales adicionales que pueden usar para ofrecer otros servicios, el gancho es la televisión abierta pero esta es cada vez menor. 






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